En esta época del año me encanta recoger espliego y colocarlo en un jarrón. Esta planta no solo es bonita, también desprende un olor que me cautiva.
Normalmente se conoce al espliego como “lavanda”, podríamos decir que es lo mismo, pero realmente hay unas 60 especies distintas, unas destinadas más a botánica y otras a perfumería. Espliego es el término correcto por el que se conoce en el mundo de la botánica, lavanda es el extracto de este para utilizar en perfumes y colonias.
Para realizar este sencillo DIY he cortado un poco de espliego, es importante no ponerlo en agua y dejarlo secar sin más. También he utilice una botella, cinta de estilo vintage y una pistola de silicona. Como veis es muy sencillo, colocamos el espliego dentro de la botella, recortamos la cinta a la medida adecuada y pegamos con un poco de silicona a la altura deseada.
El resultado queda muy bonito para decorar cualquier estancia de la casa y además sirve de ambientador. Quizás al principio te parezca que se desprende mucho la flor, pero cuando el espliego quede bien seco apenas se caerá.
Si os ha gustado esta planta os animo a acudir este fin de semana al festival de lavanda que se realiza en Brihuega, Guadalajara, un plan distinto que no os dejara indiferentes y además por mi tierra. Precisamente esta semana en el blog de Mamas Viajeras que sigo desde hace poco, nos hablan de los fantásticos campos de lavanda en Brihuega y su festival.
azul y tul 